sábado, mayo 08, 2004

Mi martinez querido..



Que distinta me parece mi ciudad

No escogemos las ciudades para vivir, las nacemos,
las vivimos, gozamos y sufrimos, las caminamos,
poseemos, y compartimos sus espacios
con una rutina encomiable, como si devotos
entráramos a su purgatorio, jardín de oportunidades y desencuentros.